Rubén Gómez Bustamente, al cual se le realizaron, pruebas de anti-doping para saber si había consumido alucinógenos para reaccionar de esa forma alocada de manera inesperada.
El resultado dio negativo y se le multó por la cantidad de 468 euros, por acoso sexual y la Real Federación Andaluza de Fútbol determinó expulsarlo por un año. Por realizar un acto público y notorio que atentan y van en contra del la dignidad deportiva y humana, de los equipos, del público, de la implicada y todo el cuerpo de arbitraje.
El Club Céltic Pulianas de Andalucía, decidió expulsar al jugador luego que se conociera la sanción impuesta por la RFAF.
Rubén Gómez Bustamante se defiende y dice que fue una broma entre amigos, me puse detrás de la linier, para hacer gracia, pero no me saqué mi parte, ni toqué a nadie. Según el acta firmada por el colegiado principal Jesús Lorenzo Rodriguez, en el minuto 80 un jugador que había sido sustituido en el minuto 67, se acercó a la linier e intentó darle con su pene en su mano.
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